¿Que impresión te da el verano?
La primera impresión es la que cuenta, dicen, aunque tras el verano te alegras que sólo sean unos meses, ¿verdad?
La impresión de que el verano es maravilloso la tenemos cuando estamos en invierno y queremos que llegue el buen tiempo, llevar sandalias, comer helados, disfrutar de la brisa de medianoche…. Espera, ¿brisa de medianoche? ¿dónde? ¿cuándo? Si abro para que refresque, me hinchan los mosquitos ¿Y las sandalias? Dejan de dolerte ya casi cuando tienes que volverte a poner los zapatos de invierno. Y lo de comerse helados, si llevas todo el año haciendo dieta, ahora ¿vas a dejar de lado tu #vidasana?
Por fin de vacaciones, y dices “esta semana, voy a dedicarme tiempo para mi” y empiezas a solucionar temas de papeleos, organizar la gran cantidad de fotos que tienes en el ordenador desde el año 1 después de Cristo, para llevarlas a imprimir, etc. etc. etc. Ah! Y la quedada con l@s amig@s para preparar la despedida de solteros de “la mari” y “el lolo”, que si cafecitos, que si hacemos esta camiseta o esta otra, que nos hagan mejor un fotomontaje,… y ups! Por arte de magia, ya es domingo. Que poco cunden los días.
La verdad que pensándolo bien el verano no es tan impresionante cuando lo tenemos encima. Aunque si bien es cierto que hay que disfrutar cada momento, así que disfrutémoslo:
Coge tu toalla y tírala en la arena, coge un libro que te enganche, sino escribe tu propia historia, pon tu música favorita, hidrátate es importante, protégete del sol, lleva contigo la coctelera del verano para tus batidos y a disfrutar la vida que son 2 días.
Establécete hábitos de vida saludables, y entre ellos está el pensar en ti, así que dedícate tiempo: no lo pienses, hazlo!
